domingo, 24 de junio de 2012

El corte de ruta por el mal estado del ramal que no llega a Río de los Sauces



Un espectáculo que será corriente.
A pocos metros de la localidad de Elena, pueblo próspero de la ruta 36 rumbo a Córdoba, encontré el corte ocasionado por un nutrido gentío manifestando su descontento con carteles cuyo contenido explicaba lo que en mas de cuarenta años vienen padeciendo los habitantes de Río de los Sauces, pueblo serrano muy visitado por turistas, tentados por su natural belleza, gente de pueblos vecinos, estudiantes, docentes y muy especial mente los camiones transportistas con su carga de minerales, canteras,   cosechas, ganado, y un interesante público en búsqueda de descanso y recreación. Pero antes deben hacer penitencia para llegar a destino: los casi 20 km. que separan la ruta 36 a Río de los Sauces, con el escollo en que se transforma en peligrosos pantanos en tiempo de lluvias o en cegadora cortina de polvareda en tiempos de seca, donde la tabla de lavar es un seguro rompecoches por donde las moto-niveladoras hacen el inútil trabajo de cambiar de lugar los pozos y los serruchos.

Pero el problema no termina allí, el problema son las rutas provinciales, materia de edulcorados discursos cada vez que sonrientes candidatos a la gobernación, como el nuestro, que enciende su verba de promesante que de sobras conocemos pero que ya no creemos, nos repica seductor.

Y tal atraso en obras de caminos corre parejo a lo que ocurre con las escuelas y colegios que se han levantado en el sur cordobés, en los cuales, a la primera lluvia torrencial donde sus techos se llueven tanto adentro como a campo raso. ¿Por qué lo recién construido tiene semejante defectos?. Resulta obvio pensar: la construcción se entrega sin previo control o por mezquindad de materiales, justo al lado de las canteras y natural materia prima, -sobra montaña y nos falta portland!!!, o como es justo sospechar , ¿habrá gato encerrado?-

Los caminos asfaltados de la ruta 36 son un desastre por donde se experimentan accidentes mortales de todos los días, pero el peaje hay que pagarlo y hace más de cuarenta años que solo se oyen floridas promesas de varios colores políticos, pero que se reiteran, sin provocar el mínimo rubor cada vez que pretenden ser votados. No hay mas que recorrer los accesos cortados y permanentemente mantenidos en épocas en que las comunicaciones de los países civilizados, ponen en evidencia esta anormalidad que producen los causantes que tienen mucha labia, pero están reñidos con la gestión de cuarenta años atrasados, por conductores mas apegados a enriquecerse fundando estancias antes de dejar el codiciado cargo, que por otra parte no son hábiles en esconder.

Por eso la indignación de los que estábamos en el corte, vino a parar en que el dinero de los impuestos, fueron dirigidos a pagar festivales de nuestra querida Mona, la esplendorosa Valeria Lynch y el alicaído Palito que no pudieron arrastrar incautos a las urnas.

Mejor le hubiera ido a nuestro gobernante, salir a pasear a sus nietos, pero no por sus rutas abandonadas, esto dicho con el respeto que debe tener su investidura.

lunes, 11 de junio de 2012

¿Que es lo que buscan los perros en Ezeiza?



Por Susana Dillon


Lo que está ocurriendo con el alocado ritmo de los acontecimientos que tienen por epicentro a los dólares, nos dan la misma sensación que cuando en el 2001 nos pisaron los depósitos a los atribulados ahorristas, ya fueran en dólares, o en pesos, en cajas de ahorro o en cuentas corriente en dinero a interés o en cajas misteriosas.
De un manotón y sin aviso, justo cuando estábamos llorando por las sojas anémicas, se nos viene el manotón dado a los verdes, juez y fiel de la balanza comercial de uso mundial, y de las operaciones inmobiliarias que hacen que los bienes materiales pasen por la colada del mercado de cambio. Que si no tiene dólar como rase, no se vende ni un clavo. Con este arrebato se paralizó el mercado, como nos pasara con las vacas y su descendencia, con los chacareros de pocas hectáreas, con los tamberos y con todo aquel productor que da de vivir a los intermediarios y a los mega-mercados que sacan las ganancias al exterior.
Aquí se está repitiendo una época en que el país cayó en bancarrota, sin que se nos explique el porqué ahora el colchón no tiene lana y la frazada nos quedó corta, pero resulta claro que los tan mentados subsidios repartidos alegremente en tiempos electorales, dejaron al descubierto que algo "que huele mal en Dinamarca" y que los despampanantes subsidios otorgados a los ciudadanos de Pto. Madero con aquellos que en su vida trabajaron ni hicieron aportes, hoy se ufanan de percibir beneficios que los ubican entre los que nunca tiraron del carro de la patria.
Una cosa es permanecer inmutable ante el televisor donde se declama nuestro glorioso bienestar, que es aplaudido por salas repletas de siempre los mismos, de una corte de privilegiados que aplauden sistemática y reverentemente sumisos, contenidos en la burbuja de la obsecuencia, y otra cosa es tragarse este sapo.
La orden del momento es pesificar, vamos a ver con que nuevas se vendrán los nuevos campeones de economía cuando nos tengan que aclimatar a la falta de divisas que les deben a las provincias, cuando deban hacer frente a sus compromisos con la caja al rojo vivo y pagando con bonos. Bueno: aquí tal vez este conocido ministro Boudou seguro que tendrá la maquinita milagrosa.          
Y que conste que todo argentino bien nacido siempre soñó con su moneda fuerte, con su peso moneda nacional de curso legal que fuera desplazada por crisis desatadas por los que se llevaron al hombro a nuestro país, se llamen José Martínez de Hoz, Cavallo o Magolla, siempre tuvimos quien jugara para que nuestro país siguiera siendo colonia.
Pero todavía hay algo más que puede subllevar hasta el mas calmo: el espectáculo dado en Ezeiza por los perros que detectan los desaparecidos verdes en el cuerpo y maletas de turistas, viajeros, jerarcas y pasajeros del montón, que han tenido la ocurrencia de sentirse libres y de hacer con sus dólares lo que se les venga en ganas, sufriendo pacientemente la requisa olfativa en lo más íntimo que albergan sus fundillos, entonces me pregunto: si nos va tan bien, si estamos blindados ante el peligro de la misma rodada del 2001. -¿Porqué dar este vergonzoso espectáculo del que al que viaja le larguen los perros para que le olfateen las partes pudendas donde se supone se esconden los verdes? ¿No les parece que ya es demasiada la paciencia de Juan Pueblo?-
Como estoy haciendo lo posible  por cruzar el charco, y si sigue esta moda olfativa, me palpito algún desorden ocasionado por la reacción de los damnificados, que no todos somos mansos ni chupamedias.

martes, 5 de junio de 2012

La leyenda del oro.



El rey Creso, que por el oro se murió de hambre.
Los griegos inventaron una leyenda para ilustrar uno de los castigos que tiene la codicia, pasión humana que se basa en obtenerlo y amontonarlo hasta la avaricia
El rey creso, que fue en sus tiempos el hombre mas rico del mundo
A los dioses que todo lo que él tocara se convirtiera en oro, tal era su delirio por obtenerlo.
Para él el oro era mas importante que el amor a su familia y a sus amigos le daba mas placer que la mas sabrosa comida, que la mas delicada bebida que el mas brillante palacio, que el mas hermoso caballo.
Para comprobar si los dioses lo habían premiado realizando su pedido, le ordenó a su cocinero le hiciera la mas deliciosa comida. No bien la tocó la comida se convirtió en oro, enloquecido de alegría llamó a su hija para que lo viera, pero la abrazó jubiloso, convirtiéndola en un estatua dora da .como siguió probando a sus allegados, todos quedaron igual. Murió de hambre, pero rodeado de riquezas
El oro ha sido un elemento que cautivó la imaginación y provocó la codicia desde su descubrimiento.
El hombre primitivo lo atesoró para demostrar su poder. Los adornos que llevaba, delataban su lugar en la sociedad a la que pertenecía,
El oro se convirtió en algo de mayor importancia por ser simbólico de riqueza, con oro compraba desde sus alimentos y armas hasta su compañera. La mujer era su objeto por él trocaba lo que se le antojaba.
En América precolombina, los aztecas rellenaban canutos de plumas con polvo de oro y servía de trueque.
En Europa, con oro y un sello crearon las monedas,
Los conquistadores españoles, no bien lo encontraron en tumbas y palacios lo convirtieron, fundiéndolo en lingotes o barras. Eso constituyó la riqueza y el poder de quien logró poseerlo, ya fuera hombre o país. Pero hubo quien inventó la piratería que fueron los que esperaban a los barcos que lo`. Llevaban a Europa quienes se los robaron o el codiciado metal fue a parar al fondo del mar...y aquí se comenzó a escribir la mas sangrienta de las historias.- el sacárselo los unos a los otros.
El oro siempre viene manchado de sangre y huele a muerte.
                                                                                        
                                                                                                      SUSANA DILLON     



Cuatro mil años antes de Cristo - "Tercer Milenio
El oro es un elemento químico de número atómico 79, situado en el número 11 de la tabla periódica. Es un elemento que se crea bajo condiciones extremas como las que se dan en el núcleo colapsante de las estrellas supergigantes.
En heráldica representa todo poder económico y es símbolo de vanidad.
El oro ha sido conocido y utilizado por los artesanos desde el Calcolítico. La sepultura 13 de la Necrópolis de Varna que representa un esqueleto) fue el primer oro trabajado del mundo.
Durante la Gran Peste Negra en Europa algunos alquimistas pensaron que podrían curar a los enfermos haciéndoles ingerir oro finamente pulverizado. Es  considerado como el metal unís maleable y dúctil que se conoce. Una onza (31.10g)  de oro puede moldearse una lámina de 28 metros cuadrados.
Está comprobado químicamente que es imposible convertir metales inferiores en oro, de modo que la cantidad de oro que existe en el inundo es constante.
Debido a su relativa rareza comenzó a usarse corno moneda de cambio.
El oro se extrae por lixiviación con cianuro. El uso del cianuro facilita la oxidación del oro formándose Au
(CN)2 2- en la disolución. Para separar el oro se vuelve a reducir empleando, por ejemplo, zinc.
El oro no es un elemento esencial para ningún ser vivo.
Wikipedía, la enciclopedia libre


Fragmentos del debate librado en la Cámara de Diputados
de la Nación Argentina en ocasión de tratarse la «Ley de
presupuestos mínimos para la preservación de los glaciares
y el ambiente periglacial». Versión taquigráfica oficial,
14 de julio de 2010


«SR.TOMÁS, HÉCTOR DANIEL (FRENTE PARA LA VICTORIA - Partido Justicialista - SAN JUAN) [...] Hoy el oro se saca de la roca utilizando cianuro, pero no es el cianuro que contamina (sic), sino un cianuro que se diluye con agua y cal.»